Óscar Calvé, la ciencia y la experiencia de un entrenador de atletas Master
Para quienes se despiertan a la hora de los marqueses, los pupilos de Óscar Calvé pueden dar buena cuenta de que a las 6 de mañana, cuando ellos salen a la calle para entrenar, las calles ya están puestas.
Óscar Calvé (Teruel, 1951) entrena a un grupo de entre 24 y 26 corredores “ya no cojo a nadie más”. Y es que, entrenar a cada uno de sus atletas, con niveles muy diferentes, distintos objetivos deportivos y circunstancias familiares y laborales particulares “supone mucho trabajo y tiempo si lo que quieres hacer de forma personalizada y seria”.
Calvé planifica los 365 días del año de cada uno de sus deportistas, incluido el descanso “porque el descanso forma parte del entrenamiento. Eso lo saben muy bien porque se lo doy por escrito”.
Además, el concepto de temporada de invierno y verano, en cuanto a objetivos en el atletismo popular, ha cambiado totalmente, con un caótico calendario de carreras que complica aún más la planificación. “A veces para algunos corredores populares la puesta en forma no es tan importante como era antes y eso es un error. Por ejemplo, no te puedes levantar de la noche a la mañana queriendo hacer un maratón, tienes que hacer una preparación y un volumen determinado. O en otros casos en los que el atleta se mete en la dinámica de querer correr más y más rápido, o lo que yo llamo ‘cotizar en bolsa’ que es saber cuándo el corredor tiene que bajar la activación y cuándo la tiene que poner en marcha. En todos los casos la orientación es muy importante porque se puede pecar de exceso o de defecto. Y nadie hace bien la puesta a punto, sino es capaz de descansar.”
Óscar Calvé está Doctorado en Educación Física y es Entrenador Superior de Atletismo. Milita en el Club Maratón Rioja con el que ha cosechado muchos éxitos como atleta en campeonatos nacionales Master. Corredor de fondo, fue el pionero de nuestra comunidad en correr el Maratón de Nueva York; fue el 21 de octubre de 1979, firmando un tiempo de 2h53:27. Durante su carrera como entrenador han sido mucho los jóvenes que comenzaron en el mundo del atletismo con él. Sin embargo hoy su dedicación está dirigida casi en su totalidad hacia el atleta veterano.
Óscar Calvé sabe muy bien el esfuerzo que supone el atletismo y transmite a sus atletas que sin ese esfuerzo su futuro estará en la práctica popular “El atletismo es un deporte muy caro en el sentido de que hay que cuidarse, hay que tener un peso, hay que entrenar… y si no pasa su ambición, sus objetivos y su proyecto deportivo por ahí, su destino es el deporte popular u otro deporte. He sido profesor de instituto y como parte del programa hacía test a mis alumnos de 1 kilómetro y siempre había seis o siete, que sin entrenar, hacían 3:08 o 3:10. A esos jóvenes les dejaba caer la idea de que practicaran atletismo, pero en el momento en el que alguno me fallaba tres o cuatro veces, yo le decía que lo suyo era el voley playa o el ping pong. Es decir, que el rendimiento tiene que pasar por la asunción de que va a poner mucho de su parte y que tú vas poner los conocimientos. Yo siempre digo que el éxito de esta ‘empresa’ un 75 o en un 80% le pertenece a él. El entrenador simplemente es un director.”
En su faceta como entrenador Master, Calvé se encarga de optimizar el esfuerzo para conseguir el mayor rendimiento en corredores de mediana y avanzada edad. En este rango de edades se ha encontrado en varias ocasiones corredores que han comenzado a practicar este deporte con muchas cualidades sin que la propia persona los supiera. “Todo lo que sea rendimiento yo ya lo relaciono con la edad, porque llevo muchos años en veterano y yo no he dejado de competir. Empecé a competir siendo júnior en el Club Maratón de Madrid y hasta hoy han pasado 54 años. Entonces, en el momento en que me hablan de una edad y de un rendimiento ya asocio la calidad. España tiene un alto nivel de edad y rendimiento físico. Aquí tenemos el caso de Maru (Marcelina Hernaiz) que es la atleta de su edad más rápida del mundo de mil metros, y que es capaz de correr a 4:20 un 10.000 a punto de cumplir 66 años. Eso hace que el mundo del atletismo se fije en ella y que para sus compañeros de entrenamiento sea un referente.”
Para el entrenamiento, Óscar Calvé se basa en la ciencia y en la experiencia “Tengo una máxima que me gusta mucho y es que yo quiero aprender con los aciertos de los demás técnicos y no fracasar con sus errores. Además, por deformación profesional, me gusta recurrir a la ciencia y a la investigación para aplicarlo en el plan de entrenamiento personalizándolo según las circunstancias de cada persona: de su edad, de su actitud, de su peso corporal, del reto… haciendo un cóctel que sea armónico.”
Muchas veces las cualidades físicas de los corredores populares no van en consonancia con su objetivo “Para un corredor popular es muy atractivo correr medias maratones o maratones porque te metes en un grupo con una gran público que no se va fijando en si vas más o menos lento. Sin embargo en pista, un segundo o dos segundos es mucho tiempo, son pruebas muy exigentes. Por ejemplo, ahora estoy entrenando a una mujer casada, con dos hijos, veterana, que por su por su morfología, por su nervio, por su carácter yo la podía ver fácilmente en un Campeonato de España Master en 1500, pero es muy difícil hacer más corredores de pista, porque para correr en pista hay que entrenar en pista y tienes que tener a más gente de tu edad entrenando en pista. Sin embargo la inercia del grupo hace que esta mujer de 45 años se dirija hacia carreras de 10.000 metros o medias maratones. Yo intento encaminar siempre al corredor a la prueba en la que puedo sacar más brillo, pero casi siempre el entorno es el que al final determina el objetivo. En las carreras de fondo cabe todo el mundo y si el grupo facilita esa motivación, al final muchísima gente acaba haciendo carreras largas pudiendo tener mayores facultades para distancias más cortas.”
En muchas ocasiones no sabemos apreciar lo que tenemos a nuestro alcance y es bueno recordar siempre que en nuestra comunidad tenemos a uno de los entrenadores que más experiencia y ciencia atlética acumula, dirigiéndola hacia atletas Master que han conseguido alcanzar puestos de podio en encuentros tanto nacionales como internacionales. Los buenos resultados en este deporte requieren esfuerzo y sacrificio. Sacrificio que a veces pasa por salir a la calle a las 6 de la mañana para entrenar, en ocasiones con temperaturas gélidas, como es el caso del grupo Master de Óscar Calvé.