25 años del oro nacional de Marcos Moreno en Decatlón

El atleta de El Corvo conmemora hoy su proclamación como campeón de España en las pistas del Adarraga, donde firmó la quinta mejor marca española de todos los tiempos y estableció un nuevo récord autonómico
El 20 de agosto del año 2000, Logroño escribió una página dorada en la historia del atletismo riojano. Aquel día, en las pistas del Adarraga, el atleta del Club de Atletismo El Corvo (hoy La Rioja Atletismo), Marcos Moreno, se proclamaba campeón de España Absoluto de Decatlón.
Los días 19 y 20 de agosto de 2000, las pistas del Adarraga acogieron el LX Campeonato de España de Pruebas Combinadas (Decatlón en hombres y Heptatlón en mujeres). La organización corrió a cargo del Club de Atletismo El Corvo, presidido entonces por Antonio Moreno (padre de Marcos), con el respaldo de la Real Federación Española de Atletismo, encabezada por José María Odriozola, y de la Federación Riojana de Atletismo, cuyo presidente era Jesús Heras.
El evento no solo buscaba coronar a los mejores combineros del país sino también para muchos la mínima olímpica para los Juegos de Sídney. Además del campeonato de España, el Adarraga incluyó un encuentro atlético en el que participaron los mejores especialistas nacionales en Altura, Disco, Martillo y 110m vallas donde los atletas acudieron para buscar pasaporte olímpico, convirtiendo a la capital riojana en epicentro del atletismo nacional.
Marcos Moreno no era un desconocido en el mundo de las combinadas. Dos años antes, en 1998, ya había logrado el bronce en el Campeonato de España de Pruebas Combinadas bajo la dirección de José Luis Martínez, entonces responsable de combinadas en la RFEA. Sin embargo, pocos podían imaginar que aquel fin de semana de agosto de 2000 el riojano, de 27 años de edad, lograría imponerse a los favoritos y firmar una de las gestas más recordadas del atletismo riojano.
El campeonato estaba marcado en la previa por la presencia de nombres como Antonio Peñalver, Marc Magrans, Xavier Brunet o Javier Benet, además de la lucha de Imma Clopés por lograr el campeonato de Heptatlón y alcanzar la mínima olímpica.
El Nacional comenzó el sábado con una jornada inaugural en la que Marcos Moreno ya dio señales de lo que estaba por venir. Tras las primeras cinco pruebas (100m, Longitud, Peso, Altura y 400m), se colocó en segunda posición provisional con 4.057 puntos, a solo 58 del líder, Óscar González, y por delante de favoritos como Marc Magrans o Xavier Brunet. En esa primera jornada, el riojano ya había logrado cuatro marcas personales, que incluían 100m (11:08), 400m (51.01), Longitud (7,30) y Altura (2,05).
El domingo, Moreno confirmó todas las expectativas. Aunque no se acercó a su mejor marca en los 110m vallas (15.13), destacó en el Disco con nueva marca personal (46,39 m) que le puso en cabeza, mantuvo el liderato en la Pértiga igualando su marca personal (4,40) y resistió en la Jabalina (53,62). La victoria quedó sentenciada en los 1.500 metros, donde firmó 4:32.31, con el propio Javier Benet marcándole el ritmo. El total de 7.790 puntos supuso no solo el título nacional, sino también la quinta mejor marca española de la historia y el récord absoluto de La Rioja que aún sigue vigente.
En el Heptatlón, la catalana Imma Clopés consiguió en Logroño su sexto título nacional con un total de 5.843 puntos, estableciendo un nuevo récord de España. Clopés, que meses antes había superado una operación de condropatía rotuliana en la rodilla, pudo recuperarse para hacerse en Logroño con el nacional y el pasaporte para Sídney. La atleta catalana, dirigida por el mismo entrenador de Moreno, no pudo terminar la segunda jornada de los Juegos Olímpicos por problemas físicos.
Aquel triunfo de Marcos Moreno en el Adarraga, rodeado de estrellas nacionales, elevó la figura del atleta a la categoría de leyenda del deporte riojano. Su legado, que continuó como gestor deportivo y que hoy ve su reflejo en la exitosa carrera de su hijo, Marcos Moreno Sáez, tuvo su “big bang” aquel caluroso domingo de agosto. Fue la consagración de un decatleta en su propia casa.
